La operación de la maquinaria y equipo, así como la calefacción de los diferentes edificios y viviendas es posible debido a los combustibles. Los combustibles fósiles, como el carbón, el coque o el petróleo, combustibles gaseosos, como el GLP o GNC, hidrógeno o biocombustibles pueden ser adquiridos con proveedores nacionales e internacionales.